4 pequeñas pero importantes costumbres de las parejas felices
Siempre se ha dicho que las bases de una relación son la confianza y la sinceridad, pero también es muy importante cultivar ciertos hábitos que ayudarán a que esta unión se mantenga en el tiempo. Hay gente que confunde hábitos con rutina, pero no tiene nada que ver. Una cosa es que siempre se hagan los mismo planes, frecuentando los mismos sitios una y otra vez y teniendo las mismas conversaciones vacías al llegar a casa: “¿El trabajo bien?” “¿Qué has comido?” y otra cosa muy distinta es crear unos hábitos saludables para la pareja, que de una manera u otra ayudan a fortalecer los lazos de la relación. Si quieres saber cómo mejorar tu vida en pareja, en unComo te enseñamos 4 pequeñas pero importantes costumbres de las parejas felices.
Índice
No perdáis las buenas prácticas
Al inicio de una relación lo más normal es que ambos os vayáis a la cama a la vez, pero con el tiempo parece ser que esto va cambiando. Luego uno se queda viendo la tele mientras el otro se va a la cama y claro, para cuando el último se vaya a acostar el otro ya estará frito completamente. Aunque parezca una chorrada, está comprobado que cuando esto sucede se incurre en una falta de comunicación y una reducción del apetito sexual, creo que no hace falta listar todas las consecuencias que esto puede tener… Por eso se recomienda que se mantenga la costumbre de acostarse al mismo tiempo aunque sea solo por sentir la cercanía del otro.
En este artículo te explicamos cómo aumentar el deseo sexual de forma natural.
¡Que nunca acaben las muestras de cariño!
Muchas personas pensarán que esto es evidente y dirán que es algo que siempre hacen. Sin embargo, si llevas mucho tiempo en una relación párate a pensarlo… seguro que son varias las veces que no te has despedido o que no has saludado cuando llegas, será por ir con prisa, por ir pensando en otra cosa o por lo que sea pero esto pasa. Daros un beso al reencontraros es una de las más pequeñas pero importantes costumbres de las parejas felices. Piensa que se trata de estímulos, la piel y el olfato tienen memoria y siempre resulta placentero hacer que nuestros sentidos revivan algo que sabemos que nos gusta.
Gustos en común, no son sólo un cliché
No hay que asustarse si al principio sois polos totalmente opuestos, de hecho puede ser una oportunidad para comenzar a hacer cosas nuevas y descubrir mundos que ni sabíamos que existían. Pero es importante que le demos una oportunidad a estas actividades a las que no estamos acostumbrados. Si por ejemplo a tu pareja le gusta hacer deporte empieza a acompañarle cuando vaya a hacerlo y busca un tipo de entrenamiento que se adecue a tus gustos, quien sabe, lo mismo acabas encontrando un nuevo hobbie. Si conseguís encontrar actividades en común veréis como el lazo que os une se va haciendo más y más fuerte. No obstante, no se trata de invadir el espacio del otro, también hay que saber dónde está el límite y hay que conservar aquellas cosas que nos gusten hacer a solas.
No te guardes lo que te moleste
Aquí aparece el tema de la confianza; debe existir la suficiente como para poder contaros cualquier cosa. Es de extrema importancia que habléis las cosas siempre, pero con más razón cuando es algo que os molesta del otro. Hay que darse cuenta de que si no se dice desde el principio nunca se va a dejar de hacer y como ya sabemos, un grano de arroz se puede transformar en una montaña con el paso del tiempo. Dedicar un poco de tiempo todos los días a sentarse y simplemente hablar es una pequeña pero importante costumbre que hay que mantener.
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