6 mitos del orgasmo femenino

6 mitos del orgasmo femenino

El mundo de la sexualidad femenina está plagado de mitos que vale la pena desmontar para entender, de una vez por todas, cómo una mujer puede disfrutar al máximo del sexo y alcanzar los orgasmos fácilmente. La industria pornográfica ha hecho mucho daño al sexo pues muchas personas dan por normales algunas situaciones que tan solo pasan en la pantalla y que, en la vida real, se precisa de mucho más trabajo y detenimiento para lograr que los dos miembros de la pareja disfruten. En este artículo de unComo vamos a descubrirte 6 mitos del orgasmo femenino que vale la pena desbancar cuanto antes.

El orgasmo vaginal es el más común

Totalmente falso, de hecho, tan solo 1/3 de las mujeres experimentan este tipo de orgasmo durante sus relaciones sexuales. Recordemos que el punto de mayor placer femenino es el clítoris y se encuentra en la parte superior de los labios vaginales por lo que con la penetración se puede estimular desde dentro pero es desde fuera donde mayor placer se consigue.

Así que, aunque hay momentos en los que una mujer puede tener un orgasmo vaginal, lo cierto es que la mayoría necesitan haber estimulado previamente el clítoris con masturbación, caricias o sexo oral para poder llegar al orgasmo. Por lo tanto, si quieres disfrutar al máximo del sexo no te conformes con solo penetraciones sino que pídele a tu pareja que te acaricie otras partes erógenas del cuerpo y, si no lo hace, tócate tú: verás lo alucinante que es la experiencia.

Se puede excitar a una mujer tocando el punto G

El punto G femenino sí que existe pero se trata de un tejido esponjoso que rodea la zona de la uretra. Cuando una mujer se excita segrega un flujo procedente de unas glándulas que se encuentran en el interior de la vagina y este exceso de lubricante es absorbido por el punto G, por lo que se agranda. Es decir, cuando no estamos excitadas es imposible encontrar el punto G pues no se puede detectar y, si lo tocas, sentirás más ganas de hacer pis que de otra cosa.

En el momento en el que se está excitada sí que se puede estimular esta zona del cuerpo que puede ayudar a llegar al orgasmo y, a veces, cuando lo consigue segrega el líquido lubricante y es cuando hablamos de la "eyaculación femenina". Una mujer sola difícilmente podrá llegar al punto G a no ser que tenga un juguete erótico pero lo mejor es que sea el compañero de cama quien se encargue de hacerlo.

En unComo te contamos cómo estimular el punto G femenino.

Las mujeres son multiorgásmicas

Hay mujeres que pueden llegar a tener más de un orgasmo durante una sesión de masturbación o en un encuentro sexual con una pareja pero esto no significa que siempre tenga que tener multiorgasmos para revelar que la experiencia ha sido satisfactoria. Además, también hay otras mujeres que no soportan que les sigan acariciando después de tener el primer orgasmo pues puede tener la zona extremadamente sensible y, por ello, no aguantar más estimulación.

Así pues, hay algunas mujeres que sí que pueden tener multiorgasmos y otras que no pueden por sus condiciones físicas. Y, sobre todo, no se debe caer en el error de que si una mujer no tiene más de un orgasmo en un encuentro la relación ha salido mal; los dos habréis disfrutado y pasado un momento íntimo y oplacentero.

El buen orgasmo es cuando se expulsan fluidos

También hay algunos mitos sobre el orgasmo femenino que se han extendido por culpa de la películas X como, por ejemplo, considerar que una mujer llega al orgasmo cuando expulsa algún fluido, parecido al semen que segrega el hombre al terminar. Esto es totalmente falso pues, aunque hay mujeres que sí que expulsan más flujo durante el encuentro, lo cierto es que la mayoría están húmedas pero no sacan ese "chorro" de flujo.

De hecho, muy pocas mujeres pueden hacerlo, así que nada tiene que ver esto con el placer del orgasmo.

Con el pene grande se pueden conseguir mejores orgasmos

Otro mito que se ha extendido por nuestra sociedad es considerar que cuanto más grande es el pene de un hombre, mayor será el disfrute sexual de la mujer. Los hombres que tienen un pene grande seguro que se han encontrado con la situación de no poder disfrutar plenamente del sexo pues la mayoría de las mujeres no soportan la penetración de miembros demasiado grandes o gruesos.

Aunque, sí que es cierto, que con el pene muy pequeño tampoco se puede disfrutar plenamente del sexo pero con una estimulación previa, juegos sexuales variados y el uso de diferentes juguetes se puede conseguir llegar al orgasmo fácilmente. Así que, el tamaño del pene no importa siempre y cuando no estemos hablando de medidas extremadamente grandes o pequeñas (micropenes).

Disfrutarás más del orgasmo si es por vía anal

Aunque el sexo anal es otro método de estimulación y de placer sexual, lo cierto es que el cuerpo de la mujer está diseñado para penetrarse por vía vaginal y disfrutar del orgasmo gracias al clítoris y a la vagina. Por lo tanto, el sexo anal puede ayudar a innovar y probar otras experiencias en la cama pero no es comparable con la penetración vaginal pues es ahí donde están todas las terminaciones.

Además, por mucho que se practique el sexo anal, la mujer deberá ser estimulada de otros modos para poder mantener la excitación y disfrutar de la experiencia. Del mismo modo, se debe ser muy cuidadoso con este tipo de sexo pues se puede dañar la zona. En unComo te contamos cómo hacer sexo anal por primera vez.

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