Cómo convivir con una persona tóxica

En primer lugar, debes aprender a reconocer a las personas tóxicas y, en la medida de lo posible, alejarte de ellas. Este tipo de personas suelen tener unos rasgos característicos que suelen absorberte toda la energía y conducirte a su estado de ánimo propio. Son personas tristes o con exceso de bajo ánimo, nerviosas y muy críticas. Suelen hacer juegos psicológicos para que se cree una dependencia respecto a ellos. Tu sentimiento de pena o culpabilidad aumenta si estás a su lado.

Convivir con una persona tóxica no es fácil, pues el origen de su carácter siempre reside en los celos, normalmente, no infundados. Eso se da, por lo general, por su baja autoestima e inseguridad, lo cual genera críticas destructivas que nos hunden la moral. Asimismo, la posesión, la envidia y el apego son otros de los muchos males que suelen hacer de este tipo de gente personas tóxicas que oscurecen nuestras vidas.

Para conseguir mantener en el hogar una convivencia tranquila y feliz, lo primero es hablar con nuestra pareja o compañero de piso y hacerle ver los problemas que tiene. Recuerda que tú no eres culpable de su malhumor, ni tampoco de que tenga pájaros en la cabeza. Es bien sencillo, debe reconocer que hay algo en su interior que no marcha bien. Tiéndele una mano si es necesario, probablemente necesita ayuda.

Te aconsejamos, también, que intentes mantener el sentido del humor en casa. Es básico para convivir bajo la tranquilidad. Relajar las tensiones, divertise más, comunicarse, mantener la calma... Son algunas de las claves que ayudarán a la persona tóxica a relajarse también, a sentirse cómodo y a gusto en el hogar. Además, es una manera sana de mantener alejados los problemas y dejar de pensar tanto en cosas externas.

Otro método para combatir a una persona tóxica es presionarle psicológicamente. ¿Cómo? Con la técnica del espejo. Piensa que muchos de sus argumentos o críticas no están infundados y es fácil desbaratarlos. Cuestiona sus críticas con reformulación de preguntas, de este modo sus respuestas serán la evidencia de su error, pues no tendrá motivos para defender sus acusaciones.

No permitas que accedan totalmente a tu intimidad. Debes tener claro que como persona libre tienes derecho a tomar tus propias decisiones, por lo que hay que evitar que sean ellos quienes las tomen por ti. No les des ese poder.

Para sofocar a una persona tóxica y su maldad debes intentar focalizar los problemas con positividad. Aléjate de la mala energía que desprenden y busca cosas positivas para que vean que la vida es divertida y bella y que hay que vivirla al máximo, pues con su actitud pueden perderlo todo.

Establecer tus propias normas de convivencia también ayudará a reducir el placaje de tu convivencia tóxica. Delimita tu espacio, haz ver que tu también puedes decidir sobre cuestiones del hogar o del trabajo y deja constancia de que sus ataques pierden eficacia ante ti.

Por último, haz autocrítica y se consciente de si tu comportamiento es limpio y adecuado. En ese caso y si los ataques se suceden, lo mejor será que rompas absolutamente con todo lo que te ate a la persona tóxica. Aléjate de ella y no dejes que te haga más infeliz. Debes vivir libre, tranquilo y feliz.

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