Las mejores excusas para no quedar

Antes de usar una excusa para no quedar con alguna persona plantéate: ¿puedes decir la verdad? A veces, si tienes suficiente confianza con esa persona, es mejor explicarle que no te apetece quedar y que podéis aplazar la cita para otro día.

Pero también es cierto que en ocasiones no existe esta posibilidad y no te queda alternativa, tienes que excusarte y probablemente inventarte algo que suene creíble para eludir el encuentro o reunión.

De este modo, una de las mejores excusas para no quedar siempre es una indigestión repentina: afirma que algo que has comido te ha sentado mal y tienes las tripas revueltas. No podrás salir de casa si constantemente debes ir al baño, así como tampoco resulta agradable visitar a alguien con los síntomas como vómitos y diarrea.

Aunque ten en cuenta una cosa... Si vas a ver a esa persona en los días siguientes, no te pegues un atracón de comida que te deje en evidencia, ni tampoco cuelgues en las redes sociales fotografías de una copiosa cena. ¡No te delates!

Otra opción que no suele fallar es que tienes que esperar al técnico de la luz, el gas, el teléfono o cualquier otro servicio que tengas contratado en casa. Alega que no hay nadie más que pueda quedarse para recibirle y tampoco sabes exactamente a qué hora va a llegar ni cuánto va a tardar.

Quizá no sea necesario que te inventes una catástrofe en tu casa como una inundación o un escape de gas, sino que con una simple revisión rutinaria puede bastar como excusa para no quedar.

Si todavía vives con tus padres y estás estudiando, puedes decir que te han castigado y será imposible que te dejen salir de casa. Afirma que no quieres que el castigo dure todavía más tiempo y que deberás hacer caso de lo que tu madre o padre digan.

Eso sí, al usar esta excusa, deberás quedarte en casa para evitar que cualquiera pueda verte por la calle y metas la pata.

Las visitas familiares inesperadas también pueden ser ideales para librarte de quedar con alguien. Los típicos "Es que acaba de llegar mi tío de Guadalajara" o "Hace mucho tiempo que no veo a mi prima la del pueblo" son casi infalibles con conocidos, pero no los uses para excusarte con amigos cercanos que conozcan también a tu familia.

Imagínate que al día siguiente tu mejor amiga se encuentra a tu madre y le pregunta qué tal su hermano de Guadalajara y ella le responde que hace meses que no le ve o -peor todavía- que ella no tiene hermanos... ¡Sería un fail total!

Si realmente no tienes ganas de quedar, puedes usar como excusa que resbalaste en la ducha y te diste un golpetazo de aquí te espero. No hará falta que digas que te has abierto la cabeza, pero asegura que tienes las piernas adoloridas o que no puedes soportar el dolor en la rabadilla (sí, en el último hueso de la columna).

Decir que no tienes dinero puede ser perfecto para no quedar, porque que no vas a salir por ahí y que tengan que invitarte... Eso sí que no lo permites, detestas que los demás paguen tus juergas, así que mejor te quedas en casa.

En caso de que el plan fuera hacer algo que no cueste dinero como ver una película en casa de alguien o ver la gente pasar desde un banco, esta no será la mejor opción para excusarte.

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